Reseña:
Fighting Silence (#1 On the Ropes)
Aly Martinez
E
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l sonido es un concepto abstracto para la mayoría de las personas. Pasamos
la vida bloqueando la estática para centrarnos en lo que creemos que es
importante. Pero, ¿y si cuando la claridad se desvanece en el silencio, es el
extraño ruido de fondo que darías cualquier cosa para aferrarte?
Siempre he sido un luchador. Con padres que apenas se
las arreglaron para permanecer fuera de prisión y dos hermanos pequeños que por
poco evitaron la familia de acogida, me convertí en experto en esquivar los
golpes que la vida me lanzaba. Al crecer, no tuve nada que pudiera llamarlo
mío, pero en el momento en que conocí a Eliza Reynolds, siempre fue mía. Me
hice completamente adicto a ella y al escape de la realidad que nos
brindábamos. A lo largo de los años, ella tuvo novios y yo novias, pero no hubo
ni una sola noche que no escuchara su voz.
Ves, conocer al amor de mi vida a los trece nunca fue
parte de mi plan. Sin embargo, tampoco fue quedarme lentamente sordo a los
veintiuno.
Ambas cosas ocurrieron, de todos modos. Ahora, estoy
en las cuerdas atravesando las batallas más duras de mi vida. Luchando por mi
carrera. Luchando contra el silencio inminente. Luchando por ella.
Cada noche, antes de quedarse dormida, ella suspira cuando su último
respiro consciente la deja.
Creo que ese es el sonido que voy a extrañar más.
Reseña
Cuando empecé a leer esta novela, creí que sería algo
del tipo “Real” de Katy Evans. No que sea algo malo ni nada. No. Me encantó. Es
solo que ya está bastante visto. Pero me complací de ver que no era así.
Fighting Silence cuenta la historia de Till y Eliza desde el primer momento en el que se
conocen, cuando un niño pobre y al que le acaban de dar una horrible noticia,
se enamora perdidamente de una extraña que le salvará, y una niña olvidada en
su propio mundo, encuentra al amor de su vida entrando por una ventana.
Lo que más me sorprendió fue que la novela va mucho
más allá de la típica con un protagonista boxeador. Till no se aficiona al
boxeo porque sí, no es un ex luchador expulsado de la MMA o un niño del que
abusaron y aprendió a defenderse. No, a él y a sus hermanos, el gimnasio y su
programa les salva la vida. Y, por ello, permite que Eliza una su destino con ellos
como parte de la familia. También estuve obsesionada con la manía de Till de evitar
las puertas y entrar a todas partes por las ventanas. Creo que es adorable su
creencia de un mundo mágico y perfecto solo por el hecho de que Eliza se
encuentre en dicho espacio.
Aunque, sin lugar a dudas, el final fue lo que me
dejó a cuadros. De verdad que no me lo esperaba y es a raíz de éste que estoy
deseosa de leer los dos libros que le siguen sobre los oros hermanos, Flint y
Quarry.
Una historia perfecta para entretenerte esta Semana
Santa y que te dejará con ganas de más. Lucha, familia, amor... Esta novela
tiene todos los ingredientes necesarios para que disfrutes de una lectura
divertida y entretenida que, seguro, te dará que pensar.
Citas
“He estado tratando de mantener esta abrumadora necesidad de tenerte separada de nuestra amistad durante tanto tiempo, Eliza. Pero las líneas están borrosas, porque nuestra amistad es el por qué me enamoré de ti con tanta fuerza en primer lugar.”
“Incluso a los diecisiete años sabía que amaba a Till Page, pero no tenía grandes sueños de lo perfecta que sería nuestra vida juntos. Tal vez porque no quería prepararme para la decepción. Pero creo que era más porque no quería afrontar el hecho que había un futuro en todo, uno que podía o no haberlo incluido.”
“Le rasqué la cabeza y me sanó el corazón.”
“Un día iban a derribar este edificio y arrebatarnos esta vida. Pero con un chico mitad hombre roncando fuertemente a mi lado, me encontré felizmente cegada por el presente.”
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