Reseña: Echoes of Scotland Street (#5 Calle Dublín), Samantha Young

Reseña:

Echoes of Scotland Street (#5 Calle Dublín)

Samantha Young

S

hannon MacLeod siempre ha ido por el tipo equivocado de hombre. Después de que ella sale de una relación tóxica a la siguiente, su último novio le dio una llamada de atención de la peor manera posible. Con su mundo destrozado, ella ha renunciado a los hombres, especialmente los de la variedad de chico malo.

Cole Walker es exactamente el tipo que Shannon quiere evitar: magnífico, tatuado, encantador y arrogante. Pero su bajo su duro aspecto se esconde un buen hombre que está listo para encontrar a "la única". Está decidido a sacar a Shannon desde su soledad auto-impuesta y ganar su corazón.

Cuando Shannon se abre frente a la devoción constante de Cole, la pasión entre ellos se enciende en llamas a los niveles. Pero cuando el pasado de Shannon vuelve a asediarla, sus temores pueden destruir la confianza que Cole ha construido entre ellos y separarlos para siempre...

Reseña

Como Shannon, es posible que hayas perdido las esperanzas de encontrar a tu príncipe azul. En mi caso, la lectura corrompió mi visión del mundo hace mucho y mi mente creó un canon del hombre perfecto (cuyas cualidades van en aumento según engullo más novelas): mi media naranja debía ser amable, comprensivo, protector, inteligente, romántico… El problema es que ese canon no define el físico que debe tener y en esta entrega de la increíble serie Calle Dublín de Samantha Young, esa verdad queda reflejada. Pues como siempre digo –y no voy a dejar de repetirlo-, y apegándome al clásico dicho: No hay que juzgar un libro por su portada.

Echoes of Scotland Street también refleja una verdad que muy pocos reconocen y que es, en gran parte, la razón por la que personas como yo pierden la esperanza de encontrar a ese hombre ideal. El amor es algo muy serio, de hecho, es posiblemente el arma más poderosa que existe. Por amor se cruzan océanos, por amor se escalan montañas, por amor se libran guerras y por amor, uno deja todo lo que es para convertirse en otro. El problema es que la gente, para evitar más dolor o sufrimiento, se conforma con alguien que simplemente se parece a su amor verdadero. E aquí la situación en la que se encuentra la protagonista y de la cual un camuflado chico malo la salva.

¿Qué tantas cosas malas hay que vivir antes de perder la capacidad de apreciar lo bueno? La respuesta no trata de centrarse en la cantidad, sino en la gravedad de las situaciones.

Shannon ha pasado por un infierno en todo lo relacionado con sus exnovios y parece que nunca aprenderá la lección. Esto ya le ha costado a sus amigos, su familia y, en general, su vida, pero se vislumbra una luz al final de este túnel de tormento y esta se llama Cole Walker.

Cole ha pasado por su propio inframundo, siendo criado por su hermana mayor y habiendo crecido rodeado de mujeres increíbles, él solo busca una relación con futuro, encontrar a una mujer con la que envejecer y prosperar en su negocio del tatuaje.

Ambos siguen caminos con fines muy distintos, pero su pasado los unirá. Y, por pavor, ¿quién no querría entrometerse en el camino de un magnífico, tatuado, encantador y arrogante chico malo?

Descubre lo que esta relación entre Shannon y Cole te enseñará sobre la felicidad y la complementación entre dos personas de mundos opuestos.

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Citas

“-¿No confías en mí? –No confío en nadie. –Me gustas. Te vas a mudar.”

“-¿Qué acaba de ocurrir? –Creo que Rae te acaba de adoptar. –No creo que esa sea una buena idea. –No es tan malo. Es como vivir con tu propio Rottweiler.”

“Simplemente había algunas personas que no sabían cómo amar. Entonces, tuve que preguntarme por qué, si no podían aprender, incluso se molestaban tratando. Sus intentos solo lastimaban a aquellos lo suficientemente tontos como para tratar de amarlos a cambio.”

“Crecí escuchando música, leyendo libros, y viendo películas que me seguían diciendo lo mucho que subestimamos el tiempo. La advertencia empezó a perder significado. Y desafortunadamente, es solo cuando nos enfrentamos con nuestra propia mortalidad que reconocemos que el mundo nos está diciendo “la vida es corta” porque es cierto.”